19/11/2012
LAS MEJORAS EN TENDIDOS ELÉCTRICOS REDUCEN EN UN 80% LA MORTALIDAD DE AVES EN ESPAÑA, SEGÚN EXPERTOS DEL CSIC
El Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) ha presentado este jueves la obra 'Aves y tendidos eléctricos, del conflicto a la solución', promovida y financiada por Endesa y escrita en primera persona por el investigador del CSIC en la Estación Biológica de Doñana, presidente de la Fundación Migres y uno de los principales expertos internacionales en grandes aves, Miguel Ferrer.
En dicha obra se recogen los resultados más relevantes de un amplio trabajo de investigación del CSIC sobre la mortalidad de aves en líneas eléctricas desde 1974 hasta la actualidad. En esta obra se publican, igualmente, los efectos de la protección de tendidos eléctricos en SU supervivencia, con especial referencia a los datos obtenidos para el águila imperial ibérica (Aquila adalberti), la rapaz más amenazada del planeta, concluyéndose que las mejoras en los tendidos han reducido en un 80 por ciento la mortandad de estos animales en España.
Las líneas de tendido eléctrico transportan la energía desde los centros de producción hasta los de transformación y los puntos de consumo, cubriendo cientos de kilómetros, lo que en ocasiones provoca un conflicto entre el correcto funcionamiento de las instalaciones eléctricas y la conservación de la biodiversidad. La conclusión de este estudio, tras analizar en más de diez millones de metros cuadrados los efectos de las líneas eléctricas en las aves por colisión y electrocución, es que la coexistencia de pájaros y tendidos eléctricos es posible.
La literatura científica internacional consideró que el desarrollo de las líneas eléctricas supuso, antes de la implantación de soluciones, uno de los mayores problemas de conservación que había generado la actividad humana para muchas especies amenazadas. Tras la adopción de medidas anticolisión y antielectrocución por parte de las compañías eléctricas de todo el mundo, las cifras de mortalidad cayeron de manera "drástica", pasando de decenas y centenares de miles, según el país estudiado, a algunos centenares al año.
DATOS DE MORTALIDAD
En España, siguiendo las indicaciones de la comunidad científica, desde 1974 se han corregido en Andalucía 6.560 postes de diseño peligroso a lo largo de 1.446 kilómetros de líneas eléctricas y, entre otras consecuencias, la mortalidad se ha reducido "extraordinariamente" en una media general del 80 por ciento anual, lo que supone que 15.000 aves al año evitan la muerte en los tendidos eléctricos, entre ellas más de 1.100 aves de presa.
En Doñana, "la joya de la corona de la biodiversidad en España y en Europa", la corrección de tendidos eléctricos redujo en un 95 por ciento las muertes de distintas especies de este animal por electrocución --pasando de 6.000 ejemplares electrocutados al año a menos de 300-- y en un 91 por ciento los fallecimientos por colisión, pasando de 171 aves muertas por kilómetro y año a tan solo 21 por kilómetro y año.
En concreto, el águila imperial ibérica, una de las rapaces más escasas y amenazadas del planeta --su población actual es de aproximadamente 300 parejas-- tenía como principal causa de mortalidad, antes de las correcciones de los tendidos eléctricos, la electrocución (afectando principalmente a las hembras), seguida entre otras del uso de venenos y el declive de su principal presa, el conejo, afectado por enfermedades de tipo vírico.
AUMENTO DE SUPERVIVENCIA DEL ÁGUILA IMPERIAL
En Andalucía, con una superficie de más de 8.000 kilómetros cuadrados, se han estudiado desde 1974 las 158 muertes totales de águila imperial --101 de ellas en el interior de parque natural de Doñana--, siendo la electrocución la causa más frecuente, con un 39,87 por ciento --63 bajas por este motivo en Andalucía y 37 de ellas en Doñana--.
Estos datos negativos motivaron que, desde Endesa, se adoptaran las primeras medidas correctoras diseñadas por el CSIC para proteger a las aves de los tendidos eléctricos, consiguiendo un "espectacular" aumento de la supervivencia de las jóvenes águilas imperiales, que pasó del 17 por ciento hasta casi el 80 por ciento en los primeros seis meses de vida.
Asimismo, debido a las correcciones llevadas a cabo en las líneas eléctricas, se ha reducido en un 62 por ciento la mortalidad de águilas imperiales por electrocución en Andalucía y en un 97 por ciento en Doñana. Esta situación ha permitido invertir la trayectoria poblacional de esta especie, logrando que el actual crecimiento de la población se produzca al doble de velocidad que en períodos anteriores desde que existen registros.
Singularmente, a pesar del continuado y constante incremento en el número de kilómetros de líneas eléctricas, la población de águilas imperiales ha experimentado el mayor crecimiento de su historia tras la implantación de las medidas correctoras y ha pasado de 22 parejas en Andalucía a 60 parejas en la actualidad, lo que significa un incremento anual de la población de un 3,46 por ciento.
Fuente: La Información.com